Autoestima
“Quererse a uno mismo es el prinicipio de un romance para toda la vida”
Oscar Wilde
¿Qué entendemos por autoestima?
Autoestima es un concepto que utilizamos todos pero, ¿sabemos realmente qué es la autoestima? Para hablar de la autoestima tenemos que saber diferenciarla de nuestro autoconcepto.
El autoconcepto está formado por todas las características individuales de una persona, tanto sus rasgos físicos, como su carácter y su personalidad. Estas ideas o características forman la imagen mental que tenemos de nosotros mismos, que es una imagen objetiva, que no incluye juicios de valor, es mucho más racional y lógica y se puede expresar con palabras. Por lo tanto, el autoconcepto solo se limita a describir la idea de uno mismo, pero es la autoestima la que nos lleva a valorar de forma positiva o negativa esta idea. La autoestima es subjetiva, es mucho más emocional e irracional y emite juicios de valor sobre cada una de las características que conforman el autoconcepto.
¿QUÉ ES LA AUTOESTIMA?
La autoestima es el amor que se tiene por uno mismo.
La terapia de autoestima
Una persona con una baja autoestima no se quiere, se evalúa a sí misma de un manera muy negativa, no confía en sus propias capacidades y no se trata a sí misma de una manera justa. Aparecen juicios negativos, pensamientos de poca valía, lo que se traduce en dificultades a todos los niveles, a nivel personal en la consecución de metas y deseos y a nivel interpersonal con dificultades de relación con los demás, conductas con estilo de respuesta pasivo, la falta de capacidad de poner límites y la búsqueda de aprobación de los demás, así como el exceso de importancia de la evaluación externa.
Y, ¿cómo hago para quererme más? En el proceso de terapia para la baja autoestima empezaremos por el primer paso, el más importante que es conocerse. No se puede amar a alguien a quien no se conoce. Trabajaremos con las técnicas de autoobservación, de autoconocimiento, de estar consigo mismo, de escucharse, de prestarse atención y de tener en cuenta las propias necesidades para aprender a tratarse con el cariño y el respeto merecido.